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Millonarios en Lucas

Cancha 2 del Hurling Club. 5/10/2021 21h
Por Eugenio Astesiano

Nosotros le decimos «Lucas» a los miles. Dos Lucas, Tres lucas, Diez Lucas. Lo que no decimos, es Un Lucas.

A partir de hoy, voy a decir Un Lucas. Un Lucas como unidad de valor. Unidad de valor del amor. Al club, al rugby, a los amigos.

Ja, Unidad.

Creo que nunca hemos visto más unidad que ayer a la noche en el club y sobreabundancia -que nunca sobreabunda- de unidad en estos días. Unidad, unión, comunión, unión comunitaria ante el dolor.

La reencarnación, dice mi madre -que cree en eso- se da de manera inmediata. No lo sé. Sí se que Lucas Pierazzoli, en modo primaveral, dejó muchas semillas de Lucas plantadas en muchos corazones.

Ojalá reencarne en muchos Lucas.

El mundo, nuestro pequeño y verde mundo, era un mundo con Un Lucas y será otro mundo a partir de ahora. Me lo imagino con dos Lucas, o tres, o diez o más Lucas. No sé si ahora, pero pronto.

Imagino que en cada club puede haber al menos Un Lucas dispuesto a germinar. Y que de golpe, en los casi 600 clubes de Rugby de Argentina haya cientos de Lucas.

Millonarios en Lucas. Faaaa… Millonarios en Lucas.

Imagino un Rugby así y sonrío para mis adentros porque lo imagino de verdad. Muchos Lucas en muchos clubes.

«La vida es una fiesta, Crack».

10 más por hablar

Voy a hacer todo lo que no se debe, entre ellas, escribir en primera persona del singular.

Es así nomás: @hablemosderugby, la cuenta de twitter de Hablemos de Rugby, cumple hoy -21 de febrero de 2022- diez años de creada y es por eso que considero que es la fecha de nacimiento de lo que es actualmente todo Hablemos de Rugby, inclusive este blog que tiene estertores de reinicio permanente.

¿Personas a las que agradecerles por esto? Infinidad.

Me voy a permitir mencionar a algunas sin las que no habría habido, ni habría actualmente, Hablemos de Rugby.

Gastón Zmuda, colega que sabe muchísimo de rugby y que cuando empezamos en la radio se puso la producción al hombro. Hoy, de los mejores en lo suyo.

Sergio Espector, un entrenador con una visión del juego que es fascinante. Pasó de lector/oyente a compañero de estudio de radio y consultor. Un docente que me ayudó y me ayuda mucho a entender el rugby. Otro de los mejores en lo suyo.

Mario Ornat, sin cuyas reflexiones, pausas, explicaciones y argumentos todos seríamos más pobres intelectualmente. De las mejores plumas como storyteller. Revista H Rugby es el ejemplo, aunque para mí, siempre será @quieroserpillier

Urbano Nuviala, el doctor pasó también de oyente/lector a miembro estable. Todo queda mejor con sus conocimientos, buen humor y energía.

Phil. El «viva antes» que nos baja a tierra a todos y nos contiene. Es la voz cuerda de este coro. Al decir Phil y que todos sepan quien es… eso es para pocos.

José Antonio Vera es lo que me hubiera gustado ser como periodista deportivo y desgraciadamente, nunca seré. Conduce, produce, dirige y todo lo hace bien. Si hablemos de Rugby es de calidad, se la debemos a él. Te admiro infinito.

Puedo escribir un rato largo de Javier Señarís, pero elegiré ser breve.

Lo que Javier hace, no existe otro que lo haga. Nadie. Nadie en el mundo. Con él, las mil y una tormentas vivimos y las mil y una sorteamos, codo a codo. Nunca me alcanzarán las palabras para agradecerle. Hacemos un buen Ying y Yang. 10 años lo acreditan.

¡Te quiero amigo! Gracias por tanto.

El final, para ellas. Sin su paciencia, comprensión, apoyo, impulso, aporte, sonrisas, enojos y demás, jamás hubiera habido nada de todo esto. Vale, Nat, Valen y obvio, Meibel.

Hablemos de Rugby es parte de una vida, mi vida, que es una vida llena de rugby. Gratitud infinita para todos los que ayudaron y ayudan a que siga vigente.

Gracias, gracias y más gracias.

Eugenio Astesiano

Hablemos en 2022

Hablemos de Rugby se distingue y se ha distinguido -desde su nacimiento en 2012- por hacer alarde de la calidad de sus contenidos.

Ha sido nuestra exigencia y lo hemos convertido en nuestro lema.

Cuando dijimos y decimos que «Hablamos de lo que vemos» es porque creemos y estamos convencidos que así debe ser y que es la única manera de emitir una opinión fundamentada.

Sin mirar rugby no nos podemos hacer una idea de lo que pasó y sin ese background, no seríamos confiables y nuestra opinión no tendría sustento.

Opinión con sustento. Nuestra opinión. La nuestra.

«Pero son muy subjetivos», nos dicen. ¿Subjetividad? Sí. Toda opinión es subjetiva y toda opinión es discutible. Nosotros opinamos y decimos lo que creemos y brota desde lo más profundo de nuestros corazones rugbísticos.

No somos ni pretendemos ser agradables ni políticamente correctos. Tampoco vamos a coincidir siempre con nuestro público ni entre nosotros. A veces coincidiremos, pero a veces no.

¿Es posible eso? No sólo es posible, es fundamental.

«Hacen algo para un nicho dentro de un deporte de nicho», nos dijeron muchas veces. Algunos lo han hecho con buenas intenciones y otros con esmerado desprecio hacia lo que creemos que es lo que tenemos que hacer.

¿Por qué? Porque desde 2012 hemos seguido ese derrotero. Tratar de usar buen lenguaje rugbístico, dar apreciaciones fundamentadas, todo con una subjetividad notoria, pero argumentada.

Queremos hacer y creemos que hacemos el mejor podcast de rugby en idioma castellano. Ha sido y es nuestra vara, nuestra exigencia. Diez temporadas (entre radio y podcast y todas sus ramificaciones) nos sirven de plataforma para mantener ese deseo, intacto.

Entendemos que se puede construir desde el disenso, las ideas diversas, el debate e incluso, desde el silencio. No pretendemos tener razón ni queremos convencer a nadie de que nuestros argumentos son los válidos.

Tenemos fallas, faltas, debilidades, aciertos y buen ojo, todo en su justa medida. Intentamos ser genuinos y adaptables a las realidades que se nos presentan.

Nuestro público mutó en estos últimos años. Ahora y desde hace rato es mayoritariamente español, lo que supone para este equipo de trabajo un desafío adicional, aunque no lo parezca.

Nuestro público también creció. Está cada vez más informado, es más exigente y nos audita cada palabra semana a semana. Si no fuésemos exigentes, ese público -devenido hoy en #FamiliaPaganini- que hace un estipendio mensual para escucharnos, no existiría. Se habría evaporado, esfumado tan rápido como lo hacen las palabras sin sustento.

Todo esto es para decirles gracias a todos por estar, acompañarnos, exigirnos, alentarnos y darnos un lugar en sus vidas. Ustedes nos dan lo más valioso que tienen: su tiempo. No estamos como para defraudarlos.

Gracias inmensas por acompañarnos una temporada más. Un abrazo para todos.

La escalerita del rugby argentino funciona y funciona bien

Por Eugenio Astesiano (@ugeastesiano)

Insistimos, insistimos y finalmente, después de tanto insistir, la Unión Argentina de Rugby nos abrió sus puertas de Casa Pumas para poder ver, en vivo y en directo, las finales del InterAcademias de la UAR del 2021.

¿Qué es o qué fue exactamente el InterAcademias de la UAR?

Bueno, para eso y para averiguar (y afirmar) lo que en definitiva se convirtió en el título del post, nos contactamos en el último twitch de #EdenParkARG con los cinco Managers de las Academias de la UAR: Miguel Bertranou (Oeste), Nicolás Galatro (Litoral), Martín Amón (Buenos Aires), Galo Álvarez Quiñones (Centro) y Álvaro Galindo (NOA).

Les dejamos el link de una charla que dura bastante más de una hora y en la que explican todo lo referido a cómo el rugby argentino goza de buena salud en cuanto a generación de jugadores para sus diferentes equipos y seleccionados.

También, que hay que esperar que en 2022, este InterAcademias sea un certamen hecho y derecho, competencia oficial UAR.

Eso, entre otras cosas.

Como cada viernes a las 19h de ARG, hacemos #EdenParkARG junto a Juan Pablo García (@JPGarcia2) y Federico Espósito (@redacttore).

Ir a #EdenParkARG del viernes 29/10

Piera

Por Eugenio Astesiano

Se le parte la cara con la sonrisa. Se le abre al medio. El único malhumor es… nunca. Nunca, jamás en el Club. Ese rato de Club, esos muchos ratos de club, nunca vieron otra cosa que tu sonrisa.

Y tu energía. Tu intensidad. Tu empuje. Tu omnipresencia para lo que hiciera falta.

En lo que fuera, de lo que fuera. Jugando, ni hablar. Afuera también. Siempre con tu risa eterna.

¿Por qué los buenos no se pueden despedir como se debe? ¿Por qué? ¿Qué mierda puta del destino quiere eso? ¿Por qué es así?

Hoy se prendió un fueguito -un fuegazo- en el Gobo. Mucha gente que te ama. Sí, tranquilo que hubo chinchus.

Hoy se hizo todo lo que vos hubieras deseado, querido, obligado que se haga.

Pero hubo y hay dolor. Hay un profundo dolor en medio de ese humo de leña y de carbón. Hay risas. Hay silencios. Hay llantos. Hay muchos pares de ojos que miran a la nada pero que te buscan.

No se entiende que no estás.

Hoy tenías que venir con un pan, hinchar las pelotas, comer algo ahí, e irte a ver a Racing.

Pero hoy Piera, toca otra cosa.

Hoy tenemos que decirte lo mucho que te queremos. Lo mucho que vamos a sentir tu ausencia. Lo muy profundo de la tristeza sin fin de saber que el martes no vas a venir a entrenar. Ni el jueves, ni el sábado.

En realidad, lo de «no vas a venir» es apenas y sólo físicamente, porque vas a estar.

Qué cagada Piera. Vas a estar y no te vamos a poder ver.

Apenas más de Mil

Por Eugenio Astesiano

No sabemos si es mucho o poco y tampoco tenemos claro si eso acaso importa. Sí, sabemos que esos mil suscriptores que nos siguen en nuestro canal de Ivoox han sido evangelizados en base a un trabajo honesto y meticuloso de ver horas y horas y horas de rugby para poder, desde allí, sacar conclusiones y compartirlas con ellos.

Siempre hemos ido en crecimiento. Deseado, pero quimérico. Muchas veces a punto estuvimos de mandar todo a tomar por culo (como dicen la gran mayoría de nuestros seguidores, espeñoles) pero como dice el proverbio ruso al que tanto hacemos gala «Si ves que tu barca se hunde y quieres rezar, reza. Pero nunca dejes de remar hacia la orilla».

Costó y cuesta remar, para qué nos vamos a engañar. Pero lo cierto es que nunca hemos dejado de hacerlo.

Así, desde 2012, desde la primera edición del Rugby Championship, cuando Hablemos de Rugby vio la luz.

El objetivo era en aquel momento, un poco personal: hablar de rugby (de juego, de Los Pumas, de rugby internacional) porque en el programa que estaba no me dejaban hacerlo por motivos varios. Uno de ellos, el tiempo.

Entonces, primero hubo que pagar por ese tiempo de aire. Muchos años. Los suficientes como para que se prendiera la laparita de transformarlo en Podcast primero y de pago, inmediatamente después, por obra y gracia de Javier.

Hablemos de Rugby no es sólo lo que se soñó en un principio. Ya lo era y, como un Pokémon, ha evolucionado y ha ido dejando pequeños retoños. Revista H, Play Rugby SER, Eden Park.

Ya vendrán otros también. O renacerán aquellos que duermen el sueño de los justos.

En definitiva, como si fuésemos un pack de Obélix con una pelota de rugby como menhir, seguiremos caminando vaya uno a saber hacia donde.

Ojalá, hacia el paraíso del rugby. Mientras tanto, iremos disfrutando del camino y de la vista junto a Javier Señarís, José Antonio Vera, Urbano Nuviala, Phil y los Paganinis que ya son parte de la familia.

No se tiene que ir a ningún lado

Por Eugenio Astesiano

@ugeastesiano

Cambiar todo o no cambiar nada no parece ser la solución. Y además, ¿cambiar qué de Los Pumas? ¿Jugadores? ¿Miembros del staff? ¿El staff entero? ¿La estrategia general de juego? ¿Las tácticas?

¿Qué? Veamos.

Si hay algo que hemos aprendido a los tumbos es que los cambios radicales, intempestivos, los timonazos exacerbados, los impulsivos, nunca llevan a buen puerto.

¿Qué pasaría si mañana se despierta Ledesma y dice «hasta acá llegué, me cansé, listo, renuncio»?

Seguramente, nada bueno.

Igual que nada bueno ocurrió cuando lo tuvo que hacer Hourcade en la sala de prensa de Colón de Santa Fe ni cuando lo hizo Tati Phelan en la sala del segundo piso de la UAR en Dardo Rocha.

«Ledesma tiene que renunciar e irse ya» desprotrican y auguran los más audaces y osados, a viva voz. Muchos otros, por lo bajo, sin que se escuche mucho, pero lo suficiente como para que se oiga.

OK. ¿Y quién asume si se va Ledesma?

«Cualquiera». Ajá. Cualquiera. Como si fuese muy fácil reemplezar un Head Coach por otro así de buenas a primeras.

Ya hemos visto que, con un plan alternativo aunque más no sea de emergencia que se torna en efectivo luego, la nave no siempre va a buen puerto a mediano plazo. Imaginemos, entonces, sin un plan alternativo.

La experiencia indica que es mucho, pero mucho más fácil buscar esas alternativas en las tácticas que alteren – o no- la estrategia, con cambios de jugadores y puestos y probaturas varias, que cambiar un entrenador o su staff o todo, en medio de un proceso mundialista.

Ledesma no se tiene que ir a ningún lado. No ahora.

Ledesma cuenta como Head Coach con una ventaja adicional que no tuvieron Phelan y apenitas, Hourcade.

La cantidad, la base de jugadores sobre los que puede elegir, que es inmensa.

La de jugadores que produjo y produce el sistema de Alto Rendimiento de la UAR es digna de reconocimiento y más, en este contexto.

Siempre hablamos de camadas exitosas de Pumitas. Con revisar las últimas cinco, tomaremos dimensión del trabajo y las opciones.

Dicho esto, la selección de jugadores de un entrenador siempre es criticable, pero hasta cierto punto. Lo importante es qué hace el entrenador -y sus asistentes- con sus elegidos. Si cumple con los objetivos, o no.

Esto es, sin que importe demasiado quiénes, lo que cuenta es qué propone táctica y estratégicamente y si las piezas encajan en lo que propone.

Si los jugadores no encajan, o lo que propone -sus objetivos- no se cumplen, o ambas cosas, es por ahí donde hay que apretar las clavijas y afinar.

Mario Ledesma es quien tiene que hacer que las cuerdas elegidas entreguen las notas deseadas. Si no lo puede hacer, tiene otras cuerdas para probar. Nunca o poquitas veces, las cosas funcionan de una.

El año pasado Los Pumas tuvieron un buen año desde los resultados y en algunos momentos, desde el juego. Lo que pasa es que nadie se acuerda porque esto es Argentina y vivimos revolcados entre las olas.

Hace apenas once meses, las notas sonaban bien porque las cuerdas estaban afinadas. Puede volver a pasar, con cuerdas nuevas o seminuevas, bien afinadas una vez más.

Hay por delante dos partidos contra Australia, y Australia sirve como ejemplo.

De la mano de Dave Rennie ha recorrido en más o en menos, desde su asunción como Head Coach, un camino tortuoso desde los resultados, pero auspicioso desde lo estratégico. Diríamos, muy auspicioso.

En este momento, Ledesma puede imitar ese proceso.

No se trata de ganar o perder. Se trata de encontrarle la vuelta al juego con los jugadores que él eligió.

Por historia, por estadísticas y por muchas razones, Los Pumas siempre han perdido más de lo que han ganado. Lo que queda en la memoria es el juego. Siempre el cómo prevalece ante el resultado puntual.

Dave Rennie parece el ejemplo a seguir. Mario Ledesma tiene a la mano posibles soluciones a sus problemas de hoy: darle confianza a los más jóvenes y hacerlos jugar.

Ellos van a responder en el campo como han respondido hasta acá. Los Pumas finalizaron su partido ante los All Blacks con Gonzalo García, Santiago Carreras, Santiago Chocobares y Lucio Cinti como 9, 10, 12 y 13, respectivamente.

Está a la vista que puede funcionar.

Poco para agregar

Ya hablaron los jugadores, dentro y fuera de la cancha. Hablaron en ese idioma que todos entendemos.

Sí, es verdad que la placa dice Los Pumas 25 – All Blacks 15.

Más que suficiente.

Los esperamos en en el Podcast en la semana. Ahí, seguramente, tengamos más cosas para decir. Hoy, ya fue suficiente.

Si quieren escribir ustedes, está bien.

Cambios

Hola a todos. Esperamos que se encuentren bien al leer estas líneas.

Hablemos de Rugby, cambió.

Javier ya le contó a nuestra querida «Familia Paganini», a aquellos que desembuchan 1,50 Euro cada mes para acceder a los contenidos exclusivos del podcast, lo que había que contar. Ese es un cambio.

Este sitio web, somos realistas, tiene poco movimiento y la idea original fue que lo tendría cuando tuviésemos cosas para decir. Cuando empezamos esta web, no soñábamos ni con la radio ni con el podcast ni con lo que ha pasado con Hablemos de Rugby.

Tal vez pase desapercibido para la enorme mayoría de vosotros, pero aunque parezca poco, para nosotros, el efecto Hablemos ha redundado en éxitos periodísticos. Lo que acá se dice, se toma por dicho con fundamentos. Eso no genera dudas. Y si las genera, bienvenido es. Acá, y esto ha sido siempre así, se opina y se argumenta. Guste o no, caiga simpático o no, sea agradable o no, acá se opina. Siempre.

Hablemos de Rugby ha logrado por y/o a través suyo, generar amistades fuertes, crear otros medios, generar otros espacios y formatos periodísticos, conciliar posiciones que eran irreconciliables -y viceversa-, entrevistar a personas que nunca creímos poder entrevistar y negarnos a entrevistar a otros que querían serlo.

Siempre hemos intentado, con mayor o menor resultado, mantenernos a flote dignamente a pesar de las enormes, gigantescas dificultades económicas y de toda índole que como periodistas y analistas de rugby, hemos atravesado en nuestros ocho años de vida.

Es verdad: no tenemos la cantidad de seguidores extraordinaria que podríamos haber tenido de haber hecho o haber elegido otro camino, más cercano al clickbait o al sensacionalismo o al hype. Pero las cosas son como son y elegimos este.

Sin embargo, y en lo que parece un mar de lágrimas de pésimas noticias, queremos compartir con ustedes algunos números e hitos de Hablemos de Rugby del último año, desde septiembre de 2019 a esta parte.

A hoy, 23 de septiembre de 2020, llevamos grabados y publicados en el último año 102 podcasts. Eso, da un promedio de poco más de 8 Podcast por mes (8,5).

A razón de una hora y veinte minutos de promedio por emisión (80 minutos), podemos decir que mensualmente, han habido aproximadamente 640 minutos de análisis de rugby, de calidad y fundamentado, disponible para ser escrutado y puesto en tela de juicio.

Esos 102 podcasts han tenido cerca de unas 20.000 escuchas redondas, apenas un poquito más. Y para poder grabar estos podcasts, nos vamos a basar, ceñir, a los números de Javier -mucho más ordenado y prolijo en estos menesteres- de cantidad de partidos vistos en los últimos 365 días… en torno a los 420 partidos de rugby.

Desde Super Rugby a partidos de Rugby Europe o la Liga de Rusia o el Sudamericano B. Desde el Rugby Championship al World Rugby M20 Trophy.

Cuatrocientos veinte partidos de rugby, vistos y analizados, y tomadas las notas correspondientes para hablar de rugby con fundamentos que creemos ineludibles, obligatorios y que son, en definitiva, lo que nos ha dado, nos da entidad y es nuestra identidad, nuestro signo distintivo.

«Que se dice pronto» diría Javi y si, que se dice pronto. Pero no entendemos, ni sabemos ni queremos hacer «Hablemos de Rugby» de otra forma que no sea esta.

Se nos fue largo el texto, pero creímos que era conveniente. Por cierto también, estrenamos nuevo logo. Ese es el otro cambio.

Gracias a todos por acompañarnos, por apoyarnos y por seguirnos, porque aunque choquen China con África y aunque se seque el Atlántico, mientras haya rugby, estaremos.